Tantos y el comienzo en el básquet
“Lucho” como le dicen sus familiares y amigos, llegó a Ferro la temporada pasada en el Torneo Nacional de Ascenso y rápidamente se adaptó al sistema de juego del técnico Álvaro Castiñeira. Junto a Leandro Portillo y al juvenil Facundo Jerez fueron los jugadores que renovaron con la institución para disputar la Liga Nacional de Básquet. Tiene en su haber tres ascensos, dos a la máxima categoría y uno al Torneo Nacional de Ascenso
Nació en Quilmes, provincia de Buenos Aires, dio su primer pique con la pelota de básquet a los tres años en el Club Moreno de Quilmes, comenzó usando la camiseta con el número 4 por admiración a su hermano, que jugaba con ese número.
– ¿Cómo fue que empezaste a jugar al básquet?
– Fue porque mis viejos estaban en la comisión directiva del club dónde arranqué y además mi hermano ya jugaba ahí. Y también porque es el deporte familiar, ya que mi mamá, mis tíos y mis hnos. también jugaron.
– ¿Cuál es tu mejor recuerdo relacionado al básquet?
– Mi mejores recuerdos, son a nivel deportivo, los tres ascensos que logré: dos con Argentino de Junín del Torneo Nacional de Ascenso a la Liga Nacional de Básquet y uno con Estudiantes de Olavarría del Torneo Federal al TNA, y a nivel personal haber compartido cancha con mi hermano y mis amigos de hoy día, pese a que fue siendo muy chico.
– ¿Con qué palabra te definirías?
– Un luchador que ama lo que hace y trata de dar siempre el máximo por la camiseta que vista. Humilde.
– ¿Qué otro deporte te gusta?
– Cuando era chico jugaba al fútbol en simultáneo con el básquet. Siempre me decían y pedían que siga con el fútbol porque iba a tener más futuro que con el básquet por mi habilidad ja!! Y hoy día cada vez que puedo voy a la cancha a ver a Racing, soy muy fanático.
– ¿Con qué jugador te gustaría compartir la cancha?
– Por haberlo hecho tan poco tiempo me gustaría volver a compartirla con mi hermano más que nada.
– ¿Es importante el apoyo de la gente para estar mejor en los partidos?
– Siempre suma el apoyo de la gente. Es muy importante jugar con un buen marco a favor. Y nosotros eso lo tenemos acá en Ferro así que hay que saber aprovecharlo.
– ¿Qué te hubiera gustado ser en caso de no ser basquetbolista?
– Me hubiera gustado ser tantas cosas jaja!!! (risas). Tuve épocas que decía astronauta, pero lo que más me tiraba era de ser contador aunque desistí después. Y cuando llegue el momento del retiro voy a meterme en la fábrica de mi viejo, dónde ya están mi hermano y hermana.
– ¿Qué te gustaría hacer cuando te retires?
– Me gustaría poder viajar y conocer varios lugares, además de formar una linda familia y disfrutar de ellos y amigos.
– ¿Algún consejo para un niño que quiere llegar a ser jugador?
– Les aconsejaría que se diviertan con sus compañeros, que no se lo tomen con tanta responsabilidad y presión a esa corta edad. Y a los padres, que los acompañen y disfruten de verlos correr atrás de la pelota sin exigirlos. Después llegará el momento en el cuál si quieren llegar, tienen que decidir dejar muchas cosas de lado para darle más tiempo al entrenamiento personal.
– ¿Por qué la elección del número 4 cuando comenzaste a jugar?
– Siempre usé la camiseta con el número 4 por seguir a mi hermano jaja!!! Ahora de grande fui cambiando por distintos motivos. Aunque me sigue tirando el número por tantos años que lo usé.
– ¿Algún recuerdo en particular de tu carrera como basquetbolista?
– Tengo muchos recuerdos, pero el que más recuerdo es una final de mini que perdimos. Yo estando en Boca, y jugamos la final en APV, justamente contra Ferro. Desde ese entonces le tuve bronca al club y mirame ahora, vistiendo feliz la camiseta verdolaga.